Acabamos de publicar en Marine Policy un artículo en el que evaluamos el impacto de la COVID-19 sobre la pesca en España. En el artículo constatamos una reducción del 11% en los desembarques en 2020 en comparación con los niveles previos a la pandemia. Las pesquerías artesanales experimentaron una mayor disminución del esfuerzo pesquero, pero las flotas industriales sufrieron una mayor reducción del valor obtenido de la venta de sus capturas. A pesar del desafío experimentado, el sector pesquero español demostró resiliencia al adoptar estrategias adaptativas como la diversificación de especies y la distribución directa de productos del mar para mitigar las pérdidas.